Hoy el sabor del presente y su crítica de: “El secreto de sus ojos”

De vez en cuando, en un instante cualquiera de un día normal y cotidiano; alguien sin quererlo, por esas casualidades de la vida, descubre la perfección. Eso me pasó cuando entré al cine a ver “El secreto de sus ojos”.
Una película que no sólo justifica (con creces), el valor de su entrada; sino que además logra el milagro, de penetrar la estructura de nuestra conciencia y nos deja pensando en aquellas cosas que siempre queremos sentir y no podemos alcanzar. Ese tipo de películas, que te deja en silencio, cargado de emociones y con un montón de certezas intuitivas.
Esta excelente joya del cine argentino, dirigida por Juan José Campanella (el exitoso director del Hijo de la novia y Lunas de Avellaneda) y protagonizada por Ricardo Darín, Soledad Villamil y Guillermo Franchella, entre otras figuras, está destinada a dejar su huella entre las mejores películas del cine Nacional.

SINOPSIS:

Benjamín Espósito (Ricardo Darín) acaba de jubilarse después de una vida como empleado en un Juzgado Penal. Tiene un sueño largamente postergado: escribir una novela. Para narrarla no pretende inventar nada, al contrario; contará una historia real de la que ha sido testigo y protagonista, en la lejana Argentina del año 1974; la historia de un asesinato y de la búsqueda y el hallazgo del culpable.
Pero en esa Argentina turbulenta, que se adentra sin remedio en una larga noche de violencia y de muerte, el crimen, la justicia, la política y la venganza, son vientos demasiado poderosos como para que los personajes puedan escapar a esas fuerzas.
Espósito no escribe porque sí. Aunque le cueste reconocerlo, escribe para una mujer de la que está calladamente enamorado desde hace demasiado tiempo (Soledad Villamil). Una mujer que ha compartido con él esa historia. Pero las cosas resultan mucho menos sencillas de lo que Espósito ha querido imaginar; el ejercicio de la memoria no sólo ilumina el pasado. También echa una luz descarnada sobre la vida de Espósito y su acto de memoria; sus acciones, sus decisiones, sus irreparables equivocaciones.
Los recuerdos no son una mansa superficie sobre la que yace la verdad para que Espósito la recoja. Son caminos oscuros y sinuosos. Y la verdad que se oculta detrás de ellos es mucho menos sencilla de lo que Espósito ha imaginado. Sin embargo sabe que tendrá que persistir hasta el final; para entender lo que ocurrió, para comprenderse a sí mismo, y para enfrentarse de una vez por todas a esa mujer que ama.

NUESTRA OPINION:

¿Que podemos decir que no suene exagerado? Una producción hermosa, prolija, inteligente, bien contada, sobre todo con mucho contenido y altamente recomendable desde todos los aspectos:
La imagen y la puesta en escena, que son sumamente prolijas y logran transportarnos a un tiempo y un espacio distintos.
Las actuaciones son brillantes: Ricardo Darín, sobresale en un elenco que estuvo en gran nivel. Guillermo Franchella sorprende en un papel no acostumbrado.
El guión, perfectamente desarrollado, con una historia que entremezcla mágicamente la historia de amor con el caso judicial. En la misma se toca, con maestría, temas muy delicados para nuestra sociedad, como lo son el debate sobre la justicia, el castigo y la venganza; además de temas universales como la realización personal y el amor.

Las historias se entremezclan con tanta jerarquía, que no podemos diferenciar cual es la linea principal y cual la accesoria.
Más allá de la película a nivel técnico, "El secreto de sus ojos" es puramente argentina: Los diálogos son muy ricos, bien realistas y acordes a nuestra identidad, lo que le da un plus especial, para todos aquellos que nacimos y vivimos la realidad de este país.

Simplemente una obra de arte, que me tomó por sorpresa y me dejó conectado por varios días con la historia.
Es una obra que no puede dejar pasar, y como consejo: aproveche a mirarla en el cine, porque tendrá ese mínimo espacio de intimidad que la dará el ambiente adecuado, para aprovechar al máximo ese encuentro con su yo interior y con su argentinidad.